http://www.change.org/es/peticiones/reimplantaci%C3%B3n-del-iva-de-lujo-de-al-menos-el-33?utm_source=action_alert&utm_medium=email&utm_campaign=7683&alert_id=wczsCYzweS_tbpSRhULiG
¿habéis reflexionado sobre ello antes de firmarlo? ¿habéis llevado a cabo un análisis de la petición alejado del "velo de la lucha de clases" o del cabreo porque los ricos no pagan?
La imposición sobre el consumo es un éxito recaudatorio cuando recae sobre bienes de primera necesidad ¿por qué? En términos económicos estos bienes están caracterizados por lo que en economía se conoce como baja o nula elasticidad de la demanda respecto del precio ¿Qué quiere decir esto? Simple y sencillamente, el concepto de elasticidad en economía nos indica la sensibilidad que la demanda de esos productos tienen a las variaciones de sus precios. Cuando hablamos de bienes con elasticidad precio de la demanda baja o nula, no estamos hablando sino de bienes cuya demanda no reacciona ante incrementos en el precio. Gráficamente tendríamos la siguiente situación en caso de que un bien con demanda inelástica
Como
puede verse en esta sencilla figura, la cantidad demandada permanece
invariablemente en Q* sea cual sea la cantidad ofertada, lo que da como
resultado variaciones en el precio y no en la cantidad. Esto sucede con
bienes que no tenemos la capacidad de sustituir por otros más baratos.
Pensemos por ejemplo en el agua o en los alimentos más básicos
destinados a asegurar nuestra supervivencia.
Cuando las medidas
impositivas recaen en este tipo de bienes, desde el punto de vista
recaudatorio – obviamente desde otros puntos de vista, este tipo de
medida es regresiva y bastante injusta para la gente que se sitúa en
tramos bajos de renta - , son todo un éxito pues al no poder renunciar
al consumo de tales bienes. Una subida de los tipos de IVA como las que
han tenido lugar en España nos mostraría una situación como la
ilustrada: si suponemos que el equilibrio del mercado se encuentra en
P3, un aumento de los tipos impositivos sobre el consumo, dado que este
impuesto esta configurado para que sea trasladado al consumidor final,
nos llevará hasta P2 o P1, en función de la cuantía de este.
Esto no ocurre, sin embargo, cuando hablamos de lo que se denominan bienes de lujo.
Este tipo de bienes están caracterizados por la situación contraria:
elasticidad precio de la demanda alta. Es decir, existen bienes
sustitutivos que pueden ser consumidos en lugar de estos e incluso
pueden dejar de ser consumidos perfectamente sin que ello afecte a la
supervivencia humana. Luego la incidencia impositiva sobre estos bienes
es relativamente baja.
Además no debemos olvidar, a efectos mucho
más prácticos, que en la mayoría de los casos el propietario de esos
bienes de lujo no es una persona física sino una persona jurídica (o
empresa). Estas personas jurídicas, tal y como se instrumenta el
impuesto sobre el valor añadido deben llevar a cabo liquidaciones
periódicas de IVA, donde el IVA que la persona jurídica ha soportado en
sus compras se enfrenta al IVA que ha repercutido en sus ventas y se
liquidan las diferencias (bien con pagos a la Hacienda pública, bien con
ingresos por parte de la Hacienda pública en función del resultado de
la liquidación). Jugando a ser adivino, es muy posible, que buena parte
del IVA que se pretenda cobrar por el consumo de esos bienes, en caso de
que puedan encontrar la manera de hacerlo a través de personas
jurídicas acaben siendo transferencias del Estado a esas personas
jurídicas por el incremento del IVA soportado que eso supondría.
Así
pues, la solución no es que los que son capaces de consumir bienes de
lujo tengan un tipo más alto, sino que el tipo impositivo sobre los
bienes de primera necesidad sea bajo. No es a la lucha de clases – en
caso de que ese término deba ser usado hoy – a lo que hay que apelar,
sino a la responsabilidad en la toma de medidas.
Cuando la
difusión a través de las redes sociales es tan poderosa, es necesario
que los promotores de determinadas medidas sean también responsables de
lo que proponen. En economía antes de hacer cosas es muy necesario saber
cuáles son los mecanismos de difusión del efecto y si realmente
conseguimos el objetivo perseguido. No os dejéis llevar por lo que
escucháis en la TV.